Y Ahora, ¿Cómo Viviremos?
Introducción
- El Señor Jesucristo había resucitado y había pasado 40 dias con sus discípulos, hablandoles mayormente lo relativo al reino de Dios (1:3).
- El Señor les dio un mandato, que no se fueran de Jerusalén hasta que recibieran la promesa del Padre el bautismo del Espiritu Santo (1:4-5).
- Pienso que los discípulos se encontraban con emociones encontradas, el maestro, amigo y Señor se le aparece y ahora le dice que se va, y pienso que se preguntaban, ¿y ahora qué, cómo viviremos? (1:9-11).
1. Cultivando una vida de fe y de obediencia (1:12-13)
- ‘El Señor les dio un mandato, que no se fueran de Jerusalén hasta que recibieran la promesa del Padre el bautismo del Espiritu Santo (1:4-5, 8).
- V:12a, Y eso fue lo primero que hicieron, se fueron a Jerusalen.
- V:12b, “Camino de un día de reposo”. En la época del Nuevo Testamento – se aceptaba que una persona podía caminar una distancia de 2,000 codos (alrededor de 900 metros – 2,952.76 pies – 0,9 kilometros).
2. Cultivando una vida de perseverar en la unidad, “unanimes” (1:14a)
- La unidad – se refiere a una armonía en la que los miembros tienen un objetivo o una meta común, pero pueden tener diferentes opiniones o formas de hacer las cosas.
- Unánimes (Strong Griego #4861 – σύμψυχος, ον súmpsujos) de común acuerdo, de ser de una misma mente, y de un mismo sentir.
- En cambio la unanimidad, se refiere a todos los miembros que tengan un mismo sentir, una misma mente y de un común acuerdo.
- Si tenemos unanimidad, tendremos la unidad entre nosotros en la práctica (Efesios 4:3).
- El vinculo (del gr. Syndesmos, sundesmos) – ser de una estrecha conexión y una unión duradera, y una identidad cercana o estrecha que produce armoia e unanimidad para permanecer en unidad.
- Tener la unidad sin tener unanimidad es algo que solamente esta en papel y es ajeno a la realidad. Si nosotros sólo hablamos de unidad sin hablar de unanimidad, es posible que sólo tengamos una doctrina elevada y grandiosa (Hechos 4:32; Romanos 12:16; 15:5-6).
- Pablo en Filipenses 1:27, exhorta a los filipenses a que estén firmes en un mismo espíritu y a que combatan unánimes, es decir, con una sola alma (Amos 3:3).
- Pablo le escribió a los filipenses con una teología de la erncarnación de Cristo (Filipenses 2:1-2).
- Pablo enfrentó la división producida por la carne y la inmadurez que hubo en la iglesia de Corintios (I Corintios 1:12; 3:1).
- Pablo intervino en la contienda entre dos hermanas en la iglesia de Filipo (Filipenses 4:2-3).
3. Cultivando una vida de oración y de ruego (1:14b)
- Y Jesús en su oración pidió que todos seamos uno como Él y el Padre son uno (Juan 17:21).
La oracion hace varias cosas:
- Nos ayuda a que la unidad de la iglesia sea mantenida por la oración y sin ella la iglesia esta sin vida y sin poder.
- Nos recuerda que somos dependientes de Dios.
- Nos recuerda la bondad de Diois que nos quiere oir.
- Nos recuerda que la oración del justo puede mucho.
- James Brown dijo: La vida, poder y gloria de la iglesia es la oración.
La oración con ruego:
- La oración con ruego – es cuando tomamos una postura de dependencia, humildad y de una necesidad de auxilio, de socorro porque parece que nuestras fuerza se acaban para seguir luchando, porque estamos impotente porque no esta en nuestras manos la solución, y más importante que reconocemos que Dios es Omnipotente y tenemos la fe y la certeza que seremos confortado por El.
4. Cultivando una vida a la luz de las Escrituras (1:15-20)
- Pedro había escudriñando las Escrituras, y comprendio que Judas había cumplido la Escritura (Salmo 69:25; 109:8).
- Dos maneras de ver la historia de Judas: Una puede ser de preparación para todas las experiencias que vamos a tener en nuestra vida cristiana y ministerial. Y la otra puede ser que yo puedo tener la posibilidad de traicionar al Señor, y podemos decir como los discípulos comenzaron a decir seré yo maestro.
- Pablo fue abandonado en su primera defensa por todos, pero el dijo: no les sea tomado en cuenta. Pero también dijo de Alejandro el calderero: El Señor le pague confomr a sus hechos (II Timoteo 4:16-17; 4:14).
5. Cultivando una vida de dependencia del Espiritu Santo (1:21-26)
Conclusión.
Quisiera hacer dos preguntas para la discusión, ¿cómo enfrentamos nuestras desobediencias a Dios? Y, ¿cómo identificar un arrepentimiento y un cambio verdadero o por los motivos verdaderos?